Magia en la quebrada

Magia en la quebrada

Un Rey del Bosque, desde una tipa blanca, inicia el canto. Y se convierte en concierto junto a Reinamoras, Chingolos, zorzales y encendidas brasitas de fuego. Estalla la naturaleza en la Quebrada de Tilián.

 

Tres kilómetros al sur del pueblo de Chicoana está la finca de don Eusebio Silisque. Es el punto de partida para desandar ascendiendo – al costado, varias veces cruzando – el cristalino arroyo encerrado entre las rocas y la selva montana de Tilián.

Rodeados de laureles del cerro, tipas, algarrobos, nogales, helechos y flores, las pétreas paredes se estrechan. Hasta llegar a la gruta de la Virgen de Fátima, poco antes de la cascada que te enmudece y regocija.

Estás en la tierra de indómitos pueblos originarios; en donde dicen fue celebrada la primera misa en suelo salteño; la cuna de heroicos gauchos; el mágico hogar de pobladores amantes de tradiciones, folclore y fe.

 

Los “chicuanas”

Si bien la Arqueología continúa investigando, es probable que la historia de Chicoana comience 200 años después de Cristo. En pequeños poblados de agricultores se habrían asentado (entre otros) los Tastiles, Viñacus, Ampascachis, Guachipas y Tiliánes. En 1400, los Incas llegaron a los actuales valles Calchaquí y Lerma. Y antes de la conquista española, la civilización cuzqueña deportó a la zona a los belicosos “Chicuanas”.

Tras la derrota y asesinato de Atahualpa, en 1576 Gonzalo de Abreu y Figueroa fundó “San Clemente de la Nueva Ciudad de Sevilla”, cerca del actual pueblo. Los Chicuanas la borraron del mapa. Décadas después, los españoles dominaron y, al costado del Cápac Ñan (red vial inca, reconvertida en ruta del Virreinato del Perú), nació el pueblo llamado Chicoana.

 

Guerra gaucha

“Entre las cosas hay una/ de la que no se arrepiente/ nadie en la tierra. Esa cosa / es haber sido valiente”. Así dice Jorge Luis Borges (Milonga de Jacinto Chiclana), cabiéndole el mundialmente famoso poema a los gauchos chicoanenses y su líder, Luis Burela.

Hijo de españoles, Chicoana lo vio nacer en 1775. Fue alcalde de la ciudad de Salta en 1809, pero apoyó la Revolución de Mayo. Hartos de los saqueos españoles, en 1814, a la salida de misa, Burela les dijo a sus gauchos que pelearían contra ellos. Cuando le preguntaron con que armas, él les respondió: “con las que les quitemos”. Y nació la guerra gaucha.

Se puso bajo órdenes del general y gobernador salteño  Martín Miguel de Güemes. Lo acompañó hasta su lecho de muerte, en 1821. En recuerdo del héroe chicoanense, en el pueblo se creó el Escuadrón Gaucho Coronel. Luis Burela.

 

Genuino encanto

Pueblo de genuino encanto: casas de piedra y adobe; coloniales farolas de hierro; amabilidad, tradición, bonhomía en pobladores. El apacible ambiente con gusto a otros tiempos se demuestra con plenitud en la plaza Güemes, corazón de Chicoana.

PLAZA GUEMES

Verde y autóctonamente florida, el paseo popular posee características únicas en la Argentina. Conservada casi como era antes, se encuentra cercada para impedir el acceso de vacunos, pero es accesible para las personas mediante molinetes de antigua madera.

Al frente de la plaza, hacia el Oeste, está ubicada la Iglesia San Pablo. Adentro hay obras de arte de la época hispana, entre otras, pinturas cuzqueñas del siglo XVIII.

Y cuando despierta el apetito, antes de rumbear hacia Tilián, se hace casi obligatorio conocer porque Chicoana es la Capital Nacional del Tamal.

Conjugando el pasado prehispánico y las tradiciones gauchas, esta es una comida cuyo componente principal es el maíz. El tamal se hace moliendo en mortero granos de choclo. El relleno esencial es cabeza “guateada”: carne de la cabeza de vaca, cocinada en un hoyo cubierto de brasas.

El resultado se envuelve en las cubiertas de las mazorcas. Disfrutarás cuando abras la humeante y fragante bola…

SABROSO TAMAL

 

COMO LLEGAR

Chicoana está 47 kilómetros al suroeste de la Ciudad de Salta. Se accede por la Ruta Nacional 68 y luego por la Ruta Provincial 33 (asfaltadas)

Desde el pueblo, hay que recorrer alrededor de 3 kilómetros, rumbo sur, para arribar a la finca Tilián, punto de partida de la Quebrada del mismo nombre. Contacto y consultas: 387 5474836.

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