MORIR EN BOLIVIA

MORIR EN BOLIVIA

Walter Matías Rosales murió en la puerta de un hospital en Oruro, sin ser atendido. Recuerda la muerte, supuestamente del mismo modo, del profesor salteño Alejandro Benítez. Reclamo del Senado de Salta.

 

(Foto portada: joven boliviana embarazada atendida en un fronterizo centro de salud argentino) 

 

Joven padre, músico y voluntario en centros para personas con adicciones. Walter Matías Rosales, oriundo de Neuquén, fue atacado el 12 de septiembre en la ciudad de Oruro y falleció a las puertas de un hospital sin ser atendido.

En julio del año pasado, el salteño Alejandro Benítez – docente muy querido en General Mosconi donde vivía – se había jubilado y decidió recorrer Bolivia en su motocicleta. Fue embestido por un camión. De acuerdo al Senado, murió por falta de atención médica.

ABANDONADOS / WALTER MATÍAS ROSALES (DER.) Y ALEJANDRO BENÍTEZ

Por el contrario, ciudadanos bolivianos representan hasta el 20% de quienes son atendidos – gratuita y prestamente – en los hospitales públicos salteños. Asimismo, por el tipo de cambio, oriundos del vecino país llegan en busca de establecimientos privados de salud. El costo local de la atención médica es la mitad, o menos, que en Bolivia.

Todo indicaría que la generosidad argentina se contrapone con la supuesta actitud criminal del hermano país.

El jueves pasado, por unanimidad, con el voto de los 17 senadores que estuvieron en la sesión, el Senado de Salta aprobó una manifestación en la que solicitaron a las autoridades nacionales que se revisen los acuerdos de atención sanitaria que el país firmó con el Estado Plurinacional de Bolivia.

La iniciativa partió del senador y médico Manuel Pailler (FdT, San Martín). El presidente del Senado, vicegobernador Antonio Marocco, propuso que todo el cuerpo adhiriese. Y que el acta con las expresiones de los legisladores fuera enviada al Consulado de Bolivia en Salta.

SENADOR MANUEL PAILLER

Sin compasión

Pailler expresó que debía hablar de “un hecho lamentable y que no tendría que haber ocurrido”, refiriéndose a la muerte del joven Walter Matías Rosales. Contó que quienes acompañaban a Rosales vivieron “una verdadera tragedia… Incluso les negaron un teléfono para llamar a un servicio de emergencia”

El senador aseguró que esto “no es un hecho aislado”, recordando el caso del profesor salteño Alejandro Benítez, quien falleció el año pasado en Cochabamba, tras ser arrollado por un camión. “No se lo atendió porque les pedían dinero boliviano o si no dólares, cosa que ellos no tenían. No fue asistido, fueron despojados de sus pertenencias y este profesor murió sin atención médica”, aseguró Pailler.

El senador Miguel Calabró (La Caldera, Evita Conducción) manifestó reconocimiento a la salud pública en el país y la provincia, reconoció que este sistema tiene sus inconvenientes, pero aseguró estar “dispuesto a discutir (sus beneficios) con cualquiera, de cualquier partido político“. Pailler se sumó entonces defendiendo salud pública, recordó que hace poco “en simultáneo se hicieron tres trasplantes” de órganos en el Hospital Garrahan, “eso es salud pública”, aseguró.

 

Convenio no cumplido

Yo creo que las autoridades competentes tienen que tomar carta en el asunto”, sostuvo Pailler. “Creo que se deben rever esos convenios bilaterales o multilaterales que tenemos con atención médica”, agregó.

“En este país, sobre todo en el norte, se atiende a todos los pacientes, así lleguen de Paraguay, de Bolivia, con los cuales somos limítrofes en la provincia de Salta y vienen a ser asistidos, incluso vienen a hacerse los partos, a hacerse atender los nacimientos de sus hijos porque les sale mucho más barato acá en este país, o no les sale nada porque se atienden en los hospitales públicos”, sostuvo.

E insistió con el pedido de revisión de los acuerdos y que se hagan reclamos al gobierno de Bolivia, “en forma definitiva, porque si no esta es una problemática que se va a ir repitiendo año a año”.

 

“ACTITUD SISTEMÁTICA”

El vicegobernador Antonio Marocco – presidente del Senado – sostuvo que no es el primer caso “de destrato a visitantes de la Argentina en el vecino país… pareciera que fuera sistemática la actitud que tienen para los ciudadanos argentinos en casos como estos en que se tratan temas de salud”

 

MUEREN ARGENTINOS

El “Convenio Sanitario entre la República Argentina y la República de Bolivia”, fue suscripto originalmente el 14 de febrero de 1978. Se renovó en 2006, 2015 y 2019.

Este último fue firmado el 19 de julio de 2019, en La Quiaca, Jujuy. Vence en 2024, pero se renueva automáticamente por cinco años.

En virtud del Convenio, Argentina y Bolivia se comprometieron a cooperar en:

  • Sistemas de vigilancia epidemiológica
  • Acciones integradas de salud en áreas fronterizas
  • Asistencia médica brindada en establecimientos públicos de salud

Los hechos demuestran que Bolivia no cumple. Y mueren argentinos.

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