15 millones de dólares habría acumulado el cordobés Leonardo Cositorto, en los pasados diez años. O 18 mil millones de pesos. Sin embargo, aparece inscripto en AFIP como monotributista clase A.
De niño y adolescente era tímido y tartamudo.
A los 20 años comenzó vendiendo libros casa por casa. Luego perfumes y artículos importados. Formó su propio equipo de vendedores. Se capacitó en coaching ontológico, o motivación mental. Talento financiero, carisma, experiencia lo hicieron rico y popular.
A los 45 años se presentó como pastor de la iglesia AVIVA ZOE, con el significado de “despertar a la abundancia”. En 2017, el cordobés, 55 años creó GENERACIÓN ZOE, una empresa de inversiones. Llegó a tener presencia en Colombia, Perú, Bolivia, México, Chile, Ecuador, Paraguay, Uruguay, España, Estados Unidos y la Argentina. Con alrededor de 65 oficinas y más de 100 mil miembros.
Anunció la emisión de su criptomoneda Zoe Cash, respaldada con oro: “Vamos a cambiar una moneda de Zoe Cash por un 1 gramo de oro” El valor inicial del anunciado bitcoin fue de USD 0,3, y aseguró que en dos años costaría USD 55. También que Zoe tenía minas de oro en San Juan y Jujuy.
Sin embargo, Cositorto aparece inscripto en AFIP como monotributista clase A.
Inversión mínima
El funcionamiento de Generación Zoe giraba en torno a una estructura que requería de un ingreso inicial obligatorio bajo el nombre de “membresía”. Este pago inicial era indispensable para acceder al esquema, y las personas que se sumaban debían realizar una inversión mínima de USD 400. A su vez, existían diferentes membresías premium que requerían montos más altos, como USD 1.000, USD 2.000 y hasta USD 5.000.
En todos los casos la inversión era a tres años, con la promesa que generaría un beneficio económico del 7,5/10 % de interés mensual, lo que resultaba sumamente atractivo dado que era un interés mucho mayor al ofrecido por cualquier entidad financiera. Según el Ministerio Público Fiscal de Salta, el rendimiento anual prometido era del 120%.
En esta provincia, la sede se encontraba en la calle en Pellegrini 782.
Nuevo juicio
Sobre Cositorto ya pesa una condena a 12 años de prisión por la estafa a 98 ahorristas de Goya, Corrientes, y otra por la Ciudad de Buenos Aires. En este nuevo juicio, se lo acusa de ser autor de otras 128 de defraudaciones, en concurso real con asociación ilícita, en calidad de jefe u organizador.
“Si una persona invertía 500 dólares, a las 24 horas, figuraba en la plataforma que poseía 600 dólares”, detalló el MPFS.
El líder de la Generación Zoe fue detenido hace dos años en República Dominicana por la Interpol, luego de estar más de dos meses prófugo.
A comienzo de junio, ante el tribunal, Leonardo Cositorto declaró “nunca quise estafar a nadie”. Pero en Salta, al menos 128 denunciantes nunca recuperaron sus inversiones ilusorias.