Mayormente despreciado desde las ciencias sociales; aprovechado por poderes temporales; ignorado por ateos o agnósticos. El Milagro en Salta es historia, pueblo unido, identidad. El amor al Señor y la Virgen.
Sea Adela, de 75 años, campesina que desde Molinos reiteró su peregrinación; como la cheta Romina, peregrina ciclista de 17 años, procedente de Orán, no explican lo que sienten y creen. Pero ambas, desde sus miradas encendidas, desparraman más que experiencias sensoriales. Trascendencia e inspiración.
La fe espiritual es acientífica. Debido a las ausencias de pruebas y evidencias. El filósofo, matemático y escritor británico, Nobel, Bertrand Russell, sostuvo: “hablamos de la fe cuando queremos sustituir la evidencia por la emoción”
Paradójicamente, casi todos practican una fe mundana: confían y creen en amistades, políticos, médicos, pilotos de avión, ideologías. Con la misma subjetividad alejada de razón y lógica.
“No se puede explicar”
Bautista Cerezo, de 11 años, desde Orán, llegó el domingo 14 de septiembre a la Catedral de la ciudad de Salta. Descalzo.
“Siento felicidad, no se puede explicar”, describió el niño. (https://ariesonline.com.ar/contenido/173723/bautista-el-nino-de-11-anos-que-peregrino-descalzo-siento-felicidad-no-se-puede) Y agregó, sonriente: “prueben esta experiencia, es muy lindo”
CONVICCIÓN
“La fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”
Hebreos 11:1
