El avasallamiento a la libertad de expresión y de prensa, censura, prohibición al periodismo de informar lo que hacen funcionarios públicos, y el pedido del gobierno nacional de incautar celulares, computadoras y documentación, allanar domicilios y detener periodistas, significan atacar a la misma democracia. Y colocan al gobierno nacional al borde del totalitarismo.
El trabajo periodístico difundió audios del ex titular de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), Diego Spagnuolo, acerca de presuntas coimas que involucran a la secretaria General Karina Milei. Oficio, profesión, deber, demandan cumplir periodísticamente.
Cumpliendo sus tareas, los colegas obtuvieron audios de la hermana del presidente, en los cuales se mencionaría la presunta corrupción gubernamental. En un insólito fallo, un juzgado prohibió a los medios de comunicación la difusión de las palabras de Karina Milei.
La decisión la tomó el juez Civil y Comercial Federal Alejandro Patricio Maraniello. El vocero oficial, Manuel Adorni, expresó: “La Justicia ordenó el cese inmediato de la difusión de los audios grabados ilegalmente a Karina Milei en Casa Rosada. Sostuvo, sin sustento, que “se trata de una violación grave a la privacidad institucional y no un caso de libertad de expresión”
“La coima de tu hermana”
El polémico argumento del juez sostiene que “el derecho a la libertad de expresión debe ceder ante las graves repercusiones que podría conllevar la difusión” de los audios de Karina.
El dictamen judicial es para evitar que se reproduzcan las filtraciones que salpican a la secretaria de la Presidencia, Karina Milei, y su asesor Eduardo “Lule” Menem.
Asimismo, el gobierno presentó en el fuero penal federal una denuncia por violación de la ley de inteligencia en la que solicita también la censura a los medios, además de allanamientos a los periodistas Jorge Rial y Mauro Federico.
“Somos periodistas que lo único que hicimos fue ejercer nuestro laburo. Y parece que este laburo molesta al poder; y gracias a Dios que molesta al poder”, sostuvo Rial.
“Hacemos periodismo y eso nos hace peligrosos para los que no creen en la democracia”
Jorge Rial
