El gobierno nacional de Milei cifra sus esperanzas en la ayuda financiera de Donald Trump. De tal modo, confía llegar en calma a las elecciones. Y ganarlas.
Estados Unidos “está dispuesto a hacer lo que sea para apoyar a Argentina”. El apoyo del del secretario del Tesoro de EEUU, Scott Bessent, (lunes 22 de septiembre) le dio oxígeno a la administración mileista.

Posiblemente, la asfixia comenzó el 2 de julio de 2025, cuando el ministro de Economía, Luis Caputo arrojó una arrogante frase: “Si está barato (el dólar), comprá, campeón”. El verde billete costaba alrededor de 1.230 pesos. Ochenta días después (viernes 19 de septiembre), había superado los $1.500.
Y de gris, a oscuro. Axel Kicillof y Fuerza Patria, derrotaron el 7 de septiembre al oficialismo, por 13 puntos. La semana previa a la primavera, para contener el aumento, el Banco Central vendió más de 1.200 millones de dólares. Reservas de los argentinos, provenientes del préstamo del FMI. Los cuales tenemos que devolver.
Enredado en denuncias de corrupción, el gobierno nacional perdió el control económico y político. El mercado olió sangre. Entre empresarios del “círculo rojo” y políticos hablaron del fin del proyecto Milei. Y así como dijeron que el presidente debe terminar su mandato, analizaron variantes ante el naufragio.
EE.UU y antiperonismo
El Ejecutivo nacional se aferra a dos salvavidas: la ayuda financiera del Tesoro de EE.UU. Y los votos antiperonistas.
En La Libertad Avanza, los más optimistas aseguran que el 26 de octubre obtendrán el 35 % de los votos, contra el 30 % de Fuerza Patria. Ganando, podría impulsar los ajustes exigidos por el FMI. Y recalcular como pagar en 2026 los vencimientos por 18.000 mil millones de dólares.
Aunque más no sea con la promesa de Washington, el gobierno confía que el anuncio calmará al mercado para llegar a las elecciones. Se especula que el salvataje extraordinario rondaría los 5 mil millones de dólares.
Sea como sea que se concrete la ayuda norteamericana, significará más deuda.
La cual no irá para reparar vías y caminos, invertir en infraestructuras, ayudar a las provincias, generar ingresos en turismo internacional, bajar impuestos, aumentar jubilaciones, atender a discapacitados y niños.

Como sea
Washington sostiene a Milei. El secretario del Tesoro de EEUU, Scott Bessent aseguró que ayudaran “como sea” al gobierno argentino. El auxilio financiero preelectoral podría efectuarse mediante swap, compras directas de divisas, o compras de bonos.
La primera alternativa implica un acuerdo financiero mediante el cual ambos países intercambian divisas por un período determinado.
Las compras ventas de divisas significan que el Tesoro de EE. UU vende dólares en el mercado argentino para inyectar liquidez.
Por último, la compra de deuda en dólares de la Argentina se trata de que el gobierno norteamericano adquiere bonos argentinos.
Se desconocen las condiciones a imponer, como las garantías (activos nacionales) exigidos. Lo único seguro es que el gobierno está obligado a llevar adelante las reformas de fondo. Dicho de otro modo, ganar las elecciones y más motosierra.



















